Los motivos que llevan a una empresa a decidir la implantación de un sistema de gestión normalizado en su organización pueden reducirse a:

  • Búsqueda de la satisfacción del cliente, reducción del impacto medioambienal, reducción de la siniestralidad laboral… y, siempre, la mejora continua.
  • Motivos únicamente comerciales que pueden obtenerse con la certificación.
  • Requerimientos o exigencias del cliente.
  • Exigencias internas de la propiedad o de la dirección en un grupo empresarial.

Lo ideal es que la principal razón fuera la primera, pero siendo realistas, las otras razones suelen ser las más habituales.

En todo caso, una vez que se aborda un proyecto de esta naturaleza, lo recomendable es hacerlo de la mejor manera posible de forma que aporte los mayores beneficios a la empresa y no contentarnos únicamente con la certificación.