Se trata de un sistema de gestión normalizado que pretende, mediante la gestión por procesos, buscar la satisfacción del cliente y la mejora continua.
Principales ventajas:
- Obliga a crear y cumplir con una metodología para todos los procesos identificados por la organización.
- Obliga a realizar una planificación y seguimiento de objetivos.
- Orientación a la satisfacción del cliente y la mejora continua.
- Normalización de los procesos, especialmente en organizaciones grandes con varios centros de trabajo.
- Mediante la certificación, permite demostrar a terceros el compromiso con un estándar internacional.
Principales inconvenientes:
- El coste que conlleva.
- En una empresa organizada (sobre todo si es pequeña) puede aportar muy pocas mejoras.
- El riesgo de una excesiva burocracia si se realiza un mal planteamiento.